La riqueza del reino...
Existía hace mucho tiempo un viejo rey que osaba dar órdenes insólitas a sus lacayos. Una buena tarde mandó a llamar al comandante de sus tropas y dio la siguiente orden: "Mata a los mendigos, puesto que molestan mi vista" . Y sus súbditos cumplieron a la perfección. Tomaron a los mendigos del reino y los crucificaron. Otra tarde, el rey nuevamente mandó a llamar al comandante y le dio una nueva orden: "Mata a los ciudadanos del reino, puesto que me son indiferentes" Y sus súbditos no le fallaron. Tomaron a los ciudadanos y los decapitaron. Y el rey siguió con sus insólitas demandas hasta que un día dio una nueva e inesperada orden: "Mata a mi comandante, puesto que no necesito a nadie más que a mí". Y el comandante, que era un siervo fiel a su rey, tomó su espada y se la clavó en el medio del pecho. El rey caminó por su silencioso reino. Contempló las casas deshabitadas, los molinos abandonados y sus jardines despoblados . Al ver tal escenario sintió un e...