Trotamundos: Venecia...
Llegamos a Venecia por la noche. El panorama no era para nada alentador ya que eran las 10 de la noche y no se veía gente en la calle. Como en Florencia no habíamos tenido la posibilidad de acceder a Internet sabíamos poco y nada sobre como llegar al hotel. Preguntamos en un par de negocios pero como las respuestas no coincidían decidimos empezar a caminar. Un par de franceses intentaron ayudarnos pero su búsqueda en el mapa sólo nos reveló que estábamos en la otra punta de la ciudad. Después de tan desalentadora revelación decidimos tirar la toalla y tomar un taxi acuático. Por la módica suma de 60 euros en total el taxi nos dejó a unas pocas cuadras. El paisaje, aunque oscuro y silencioso, es muy bello por la noche. Una ciudad dividida por las aguas es dificil de explicar hasta para el más avezado narrador. Llegamos al hotel dejamos las cosas y nos acostamos ya que estábamos muy cansados por la travesía y los nervios para encontrar destino. A la mañana siguiente desayunamos en grande...